miércoles, 30 de septiembre de 2009

Reflexión acerca de que todos somos únicos.

Existe la creencia de que todos somos únicos e irrepetibles.
Pero yo no me lo creo, sino cómo se explica que haya gemelos idénticos. Si, “gemelos IDÉNTICOS”, una prueba bastante clara de que, por lo menos, esas personas no son únicas. O los trillizos, copias por tres.
Y ¿qué pasa en el caso de los nombres?, ¿cuántos homónimos tenemos dando vueltas por el mundo?. Yo debo tener alrededor de 100, mínimo.
Y cuando nos dicen, ¡sos igual a un amigo mío…!
O te dicen, ¡sos igual a tu papá!
Que tenés el pelo igual que este, o los ojos igual que aquel…
En definitiva, las personas somos una combinación de elementos hartos repetidos.
En fin, yo no me creo más cuando me dicen: ¡sos única!
Porque al final, en cierta medida, todos terminamos siendo la copia de alguien.